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Coloumna de opinión de Carolina Uribe Rincon - Del exceso a la nada

Del exceso a la nada

Catalina Uribe Rincón

Catalina Uribe Rincón

El ESPECTADOR Opinión

Las opiniones de nuestros columnistas que más generaron debate.

En el año 2000 Luis Eduardo Díaz, “el embolador Lucho”, llegó al Concejo de Bogotá con 18.382 votos. Díaz es conocido por su particular historia que le ha valido invitaciones a participar en programas de televisión, así como la producción de una telenovela basada en su vida. Cuando se lanzó a la política hubo un episodio interesante: en la Registraduría no le creyeron que fuera candidato y por eso apareció sin foto en el tarjetón. En ese momento los medios especularon sobre las razones para ese inusual triunfo. Algunos analistas, recuerdo, decían que el hecho de que su foto no estuviera lo había ayudado. Se especuló con que algunos se confundieron con el voto en blanco o que los que no tenían ni idea por quién votar eligieron lo único diferente.

Volví a recordar al candidato sin foto a raíz de la campaña a la Alcaldía de Bogotá del movimiento Más Acciones, Menos Rostros, en la que candidatos y seguidores se tapan la cara con una máscara fucsia con blanco. El mensaje busca contrarrestar el personalismo común de la política latinoamericana, que se deje de pensar la política en términos de “votar por un candidato” y se enfoque más en las propuestas. No sabemos con claridad qué propuestas. En esto no enfocan la publicidad, lo que se resalta sobre todo es el silencio de la máscara.

Personas con mascaras pertenecientes al movimiento más acciones menso rostros apoyando a Nicolas Ramos

La estrategia no es del todo sorpresiva. La semana pasada La Silla Vacía publicó un artículo de la académica Mónica Pachón en el que se hace una crítica a la cantidad de partidos que se han creado y la personalización extrema de los mismos. En 2017 había 14 partidos con personería jurídica. Hoy hay 31. Esto, sumado al sistema de movimientos por firmas que gira alrededor de la persona del candidato. Se trata de cientos y cientos de candidatos que ya no tienen cómo diferenciarse. Algo que contrasta con las posibilidades que ofrece el mundo digital para intentarlo.

De ahí lo esperable que el exceso se convierta en nada. O, visto de otra manera, que, ante la imposibilidad de posicionar a una persona, se trate de posicionar a “la no persona”. Uno de los videos de TikTok de Más Acciones, Menos Rostros pone la máscara del movimiento político en primer plano y le pide a la cámara que se acerque hasta golpear una esquina de la máscara y perder visualmente la silueta. Como una metáfora de lo que está ocurriendo, entre más nos acerquemos a buscar a los candidatos, más los perdemos de vista.

FUENTE: EL ESPECTADOR